“En reconocimiento al sacrificio, colaboración y labor desplegada en la emergencia del 16 A, que afectó gravemente a la costa ecuatoriana.”

Al cumplirse un año del terremoto de 7.8 en la escala Richter que afectó a las provincias de Manabí y Esmeraldas, la tarde de este domingo, en el ECU 911 Portoviejo se realizó un acto de develación de un tótem, como símbolo de agradecimiento por el trabajo realizado el pasado 16 de abril.

El evento contó con la presencia de representantes de las instituciones articuladas al Servicio Integrado de Seguridad ECU 911: Cuerpo de Bomberos, Policía Nacional, Fuerzas Armadas, Comisión de Tránsito del Ecuador, Agencia Nacional de Tránsito, Ministerio de Salud Pública, Secretaría de Gestión de Riesgo, GAD Municipal, además de la empresa CNEL EP, quienes formaron parte del gran trabajo realizado después de aquel suceso.

El Coordinador Zonal, Ing. Silvio Larrea, expresó a su agradecimiento a cada una de las personas y funcionarios de ECU 911 quienes pusieron su empeño y dedicación para salvar vidas y brindar la ayuda necesaria en esos momentos. Indicó que “gracias a su esfuerzo la institución se convirtió en la única entidad capaz de brindar la seguridad y se logró rescatar a muchas personas”.

De la misma forma, Silvio Larrea manifestó su admiración al Ministro Coordinador de Seguridad Ing. César Navas y al Director General del SIS ECU911 Ing. Andrés Sandoval, quienes desde el mismo momento en el que ocurrió el movimiento acudieron a las instalaciones del ECU 911 Portoviejo y realizaron un gran trabajo por las provincias afectadas.

Zoila Moreira, funcionaria del ECU911, mediante una corta intervención narró la historia vivida durante esas horas en las que se encontraba trabajando como evaluadora de llamadas, señaló que en ese momento de la emergencia lo único que importaba era tratar de salvar a las personas afectadas, ella y sus compañeros pusieron el corazón aquel día. Una noche que nunca olvidaran.

Una vez realizada la develación del tótem, en el que consta el nombre de todos aquellos que formaron parte del este gran trabajo, el sacerdote Reynaldo Franco, ofreció a los asistentes unas palabras de aliento, esperanza y agradecimiento por la vida. Finalizó el acto realizando la bendición al Centro Zonal ECU 911 Portoviejo